En posts anteriores os hemos explicado la técnica de la microzanja y la minizanja, junto con sus ventajas. El post de hoy queremos dedicarlo a las múltiples aplicaciones que tiene el minizanjado y el microzanjado, ya que si bien la aplicación más extendida es utilizar la microzanja para despliegues de fibra óptica, ambas técnicas están ampliando sus ámbitos de actuación para ofrecer soluciones en numerosos sectores.
A continuación os explicamos algunos de los usos de la microzanja y la minizanja:
La microzanja y la minizanja para riegos y canalizaciones de agua
En los casos en que las tuberías de agua no requieren de un diámetro demasiado grande, la microzanja y la minizanja ofrecen soluciones muy adecuadas para este tipo de trabajos. Las acometidas a contadores de agua suelen ser tubos de polietileno de entre 20-25 o 32 mm. Si las normativas técnicas no nos condicionan en el momento de realizar la instalación, la microzanja y la minizanja nos ayudan a reducir los costes de las obras de canalizado y los tiempos de ejecución. Dependiendo del diámetro del tubo a instalar, utilizaremos una técnica u otra para abrir este tipo de canalización, ya sea en calzadas con asfalto, hormigón o incluso en aceras peatonales siempre que nos permitan por su anchura trabajar con máquinas zanjadoras.
La microzanja para instalaciones o circuitos de seguridad (CCTV, sensores de movimiento…)
Para la instalación en campas abiertas, zonas industriales o extensiones al aire libre, la gran mayoría de instalaciones de seguridad por cable no tienen en cuenta un detalle muy importante: el peligro de exponer el cable físico de señal de cámaras de circuito cerrado o bandas de detección de intrusos al aire libre y dejarlo al alcance de cualquier persona. Una solución cada vez mas solicitada es la demanda de instalación de estos cables enterrados, de manera que queden mas protegidos y resguardados de posibles manipulaciones o hurtos. Además los cables, al estar bajo tierra tienen mayor protección frente a las condiciones ambientales y sufren un menor deterioro alargando la vida útil de la instalación.
La minizanja para la instalación de alumbrado
Habitualmente los trabajos para la realización de la instalación de alumbrado se suele hacer por la acera. Este método es generalmente caro ya que se destruye parte del pavimento y requiere mover posibles elementos existentes, además ocasiona numerosas molestias a los usuarios (comercios, peatones…). Por otra parte dichos trabajos implican un desarrollo más lento. En el caso de utilizar la técnica de la minizanja para trabajos de alumbrado las ventajas son múltiples. Primeramente, por que el trazado suele pasar por la calzada de forma que se mejoran los tiempos de ejecución, ya que el proceso de apertura de la canalización es más rápido, se reducen las molestias a los usuarios y se reducen los costes globales del proyecto gracias a que la reposición del pavimento y de los elementos existentes (mobiliario, árboles, señales…) es más económica en calzada que en acera. En este caso también podríamos realizar la canalización mediante microzanjado, pero siempre tendremos que ceñirnos a la normativa vigente, especialmente en lo referente a la profundidad permitida de canalización.
En el ámbito público, la profundidad mínima para servicios de alumbrado o media tensión suele ser entre 45 y 60 cms. En ámbito privado no hay una normativa especifica para la canalización de los servicios y el cliente podrá hacer las canalizaciones que mas le convengan.
La microzanja para la instalación de sensores
La instalación de sensores conectados por cable se puede realizar mediante la técnica de la microzanja, utilizando máquinas zanjadoras de disco (microzanjadoras). Estas máquinas zanjadoras permiten abrir una hendidura regular a partir de 3 cms de ancho por la que se puede pasar el cableado que conecta entre sí cada sensor. Se trata de una forma muy rápida, limpia y poco invasiva para la colocación de sensores. Las aplicaciones de sensores son cada vez mas utilizados para los proyectos de movilidad (Smartcities) o ciudades inteligentes, ya que permiten realizar algunas instalaciones que hasta el momento eran inviables económicamente con los métodos de canalización convencional. Gracias a la microzanja se pueden rebajar considerablemente los costes de canalización y reactivar proyectos paralizados.
Es muy probable que en un futuro cercano vayan creciendo los usos y aplicaciones de esta técnica gracias a las ventajas que ofrece.
Desde Microzanjas estaremos encantados de seguir informándoos de estos avances.
